jueves, 7 de abril de 2011


Mi trabajo es no creer es lo inexplicable, pero en esta profesión es inevitable estar rodeado de cosas que no encajan. Las cosas que no encajan provocan desasosiego, confusión, angustia… hechos insólitos a los que cuesta darles sentido; o detalles pequeños, mínimos, extraños… que generan sospecha, y en ocasiones, miedo. Son cosas que no sabemos cómo, ni porque suceden… o si tiene alguna explicación que suceda… cosas que nos fascinan pero que nos asustan. Enigmas, jeroglíficos… un objeto que no cuadra dentro del conjunto, o una historia que no somos capaces de reconstruir...